La modalidad del préstamo online se convirtió en un método de financiación alternativa a partir del año 2008, que es cuando se desataría la crisis económica. Esto no quiere decir que no existiese antes, pero ese momento fue decisivo: los bancos, en lugar de facilitar el crédito, lo complicaron aún más.
Las empresas de créditos rápidos fueron la única solución que los ciudadanos y empresarios tenían a su alcance. Se decidieron a probar y se dieron cuenta de que su fama era infundada. Siempre y cuando se lean con detalle las condiciones, además de tener claro lo que se firma, son una buena opción para cuando no podemos encontrar financiación por otros medios.
¿Tienes que pagar una factura con un valor muy elevado? Por mucho que creamos que lo tenemos todo debidamente controlado, en cualquier momento nos podemos pasar con la factura de la luz, del agua, de teléfono, o cualquier otra que haya que nos venga un gasto muy elevado. Las empresas que suministran este tipo de servicio no se lo toman a broma, y antes de darnos cuenta nos lo habrán cortado. Por ello, muchas veces vale la pena pedir un crédito rápido para poder enfrentarnos a este gasto, antes de enfrentarnos a represalias mayores.
¿Tienes que pagar el alquiler, la hipoteca o la letra del coche? Aunque son gastos comunes y los tendrás controlados, en cualquier momento podría llegar a sufrir un revés tu situación financiera. Podríamos quedarnos sin empleo, sufrir un importante recorte de horas, o bien necesitar el dinero para pagar cosas más apremiantes. Nuevamente la opción del microcrédito está encima de la mesa, para darte un poco de oxígeno ese mes.
¿Necesitas financiación para tu negocio? Tanto como si ya tienes un negocio, como si buscas ampliar el que ya posees, es complicado que el banco acceda a tu solicitud de financiación. Además de tener que cumplir con criterios muy estrictos, tendrás que rellenar mucho papeleo y esperar bastante tiempo para que te den una contestación. Con un crédito rápido te será fácil acceder a la financiación que tu negocio necesita. Las empresas de créditos rápidos creen en ti, hasta el punto en el que ni tan siquiera te preguntarán el motivo por el que solicitas el dinero.
¿Quieres darte un pequeño capricho? Los créditos rápidos también están diseñados para aquellas personas que quieran darse un capricho extra y no tienen dinero para ello. Podría ser hacer un viaje con la familia, renovar su equipo informático, comprarse una gran televisión, etc.
Ahora bien, es muy importante solicitar el préstamo únicamente si merece la pena: la gran ventaja de los préstamos rápidos es que podrás tener acceso al dinero de golpe, para hacer la compra del producto o contratación de servicio que buscas. Pero habrá que tener en cuenta los gastos asociados al proceso.
Si ya te has decidido a solicitar un préstamo online, estos son los pasos que debes seguir.
Busca una empresa de créditos rápidos que te interese
Con tan solo hacer una búsqueda de una empresa de créditos rápidos que pueda acceder a la cantidad de dinero que necesitas, descubrirás que en el mercado hay un sinfín de opciones.
Es importante no quedarse con la primera que te encuentres y buscar la máxima cantidad de información para hacerte con una que realmente cumpla con tus exigencias. En el último apartado de este artículo vamos a tratar esta cuestión en detalle.
Investiga los requisitos
La mayoría de las empresas de créditos rápidos te exigirá los mismos requisitos: tener una edad entre los 18 y 65/70 años, presentar tu identificación, presentar una nómina o un justificante de que percibes ingresos de forma mensual, además de introducir tu número de cuenta bancaria, número de teléfono y dirección de e-mail.
Pero también es posible que la entidad te exija cumplir con otros requisitos (como puede ser la conexión a través de tu servicio de banca online, con el objetivo de verificar tu identidad).
Si falta algo por cumplir, la entidad se pondrá en contacto contigo.
